Cerezos en flor

- Muy buena. ¿Hacer tú?
- Sí. Receta de mi mujer. Mira, Tú coges la col. No sé decírtelo. Coges la col y le enrollas las hojas... la enrollas... - Entonces él comienza a enrollarse en la manta en la que están tumbados, y ella hace lo mismo.
- Ahora dos coles enrolladas.

Rudi sufre una enfermedad terminal y, cuando su mujer muere, se da cuenta de que ella había renunciado a muchas cosas por amor, entre ellas ir a Japón a ver el monte Fuji, y decide irse a Tokio a sentirla y a despedirse. Allí conoce a Yu, una artista callejera que le dará cariño y una visión distinta de la vida y de sentir a su esposa. Cerezos en flor es una película muy estética, como todo en Japón. La segunda parte de la película, tras el paso por Alemania, transcurre en Tokio, y nos muestra unos paisajes preciosos. Casi podemos oler las flores durante la fiesta de los cerezos en flor, o sentir la brisa calmada entre los plieges de la ropa mientras observamos la danza bhuto o danza de las sombras. Así también podemos imaginarnos comiendo los rollitos de col de Rudi de su tupper, envueltos en la manta azul en mitad de un parque. Es una historia de amor maduro y calmado, con alma budista, que llena los sentidos.

Hakusai roll

Ingredientes para 2 personas:

• 4 hojas de col china
• 150g de carne de cerdo picada
• 1/3 de puerro
• 1 trozo de jengibre
• 2 cucharadas de salsa de soja
• 1/2 pastilla de avecrem
• 1 cucharada de aceite de sésamo
• Sal y pimienta

Picamos finamente el puerro y rallamos el jengibre para obtener su jugo. Lo mezclamos en un bol con la carne picada y salpimentamos.

Cocemos las hojas de col en agua hirviendo 5 minutos y las sumergimos en agua fría para poder trabajar con ellas.

Cogemos 1/4 del relleno, lo colocamos en el centro de una hoja de col y lo envolvemos. Repetimos hasta obtener 4 rollitos.

Ponemos 250 ml de agua en una cazuela y añadimos la salsa de soja y la pastilla de avecrem. Colocamos los rollos de col con el cierre hacia abajo. Ponemos la cazuela a fuego alto hasta que empiece a hervir. Luego bajamos a fuego medio y colocamos sobre los rollitos un otoshibuta o un trozo de papel albal doblado en un círculo con la circunferencia de la cazuela y con un agujero en medio y tapamos la olla. Antes de retirar del fuego añadimos el aceite de sésamo.

Se sirven con el jugo de cocción.